Déjame...

Deja que bese tu piel,
que en mis labios
se quede tu dulce miel,
déjame descubrir
qué cosas contigo puedo sentir
y si será felicidad
o tan solo será sufrir.
Deja que nuestros brazos
rodeen nuestros cuerpos
para poder tentar al calor,
dejemos que surja
una chispa de amor
mientras nos miramos;
déjame apreciar
cada matiz de tus ojos castaños,
y catar cada rincón
de tu sonrisa celestial
porque tú mi reina,
tú eres angelical.