Asesino sin corazón

Con mi daga atravesé tu corazón
y yo me hallaba sola en aquella oscura habitación
viendo como te desangrabas al son de una canción
me di cuenta que tus palabras de amor eran solo traición,
tan solo tenía la luz de una constelación
y en tu rostro vi una lágrima y una débil súplica de perdón
solo quería que desaparecieras de mi visión
y mis manos en tu cuello ejercieron presión
esa era tu objeción, matarme sin compasión
poco a poco vas perdiendo la respiración
y me derrumbo en el suelo,
todavía sin comprender el por qué de tu decisión
y te cubrí con un velo,
ya no quería ver tu desfiguración,
solo sentía un inmenso dolor, ya no podía ver nada
ya había destrozado tu rostro de hada
¿qué te he echo yo? preguntaba amargada
he de callarte con una almohada
ahora ni podía hablar, adiós a mi vida indeseada
ahora ya no serás una niña mimada
finalmente fallecí, destrozada
y reí, una risa descarada al verte muerta y mutilada.

Otra poesía creada en conjunto con Vero Dacuña Francisco, gracias por crear conmigo esta obra.